En 1962, cuando Terence Young
decidió hacer la primera película de James Bond, Agente 007 contra Dr. No,
comenzó una de las mejores sagas de la historia que, en noviembre de 2012, saca
su 23ª versión, Operación
Skyfall.
Volvamos por un tiempo al
pasado y recapitulemos todas y cada una de las películas de esta maravillosa
colección:
Agente 007 contra Dr. No
En 1962, como ya hemos
mencionado, Terence Young nos deleita con esta primera película, en la
que James Bond (Sean Connery) llega a
Jamaica con la misión de investigar el asesinato de un agente especial
británico y su secretaria pero, al mismo tiempo, descubre la existencia de una
siniestra organización en la isla Crab Key. En esta ocasión su enemigo es el
Dr. No, que, ayudado por su cómplice, el profesor Dent, se propone ejecutar un
siniestro plan: desviar la trayectoria de los cohetes de Cabo Cañaveral.
Desde Rusia con Amor
Terence
Young sigue con la segunda parte del espía británico un año después: Una
máquina que descifra los más complejos sistemas de comunicación es el objetivo
del agente británico James Bond (Sean Connery), que esta vez tiene que viajar
hasta Estambul para llevar a cabo esta misión.
James Bond Contra Goldfinger
Esta
vez, es Guy Hamilton quien, en 1964, nos trae la tercera parte de James
Bond: El superagente 007 (Sean Connery) se enfrenta en esta
trepidante aventura a uno de los villanos más despiadados de todos los tiempos.
Dotado de la más moderna tecnología y acompañado de bellísimas mujeres, 007
tendrá que poner toda su astucia en juego para detener un complicado y malvado
plan que tiene como objetivo desestabilizar la economía mundial.
Operación Trueno
En 1965, Terence Young coge
las riendas de la saga por última vez: La
organización secreta Spectra se propone infiltrar en la base inglesa de la OTAN
a un impostor llamado Angelo, para apoderarse de un bombardero Vulcan
Vindicator equipado con dos bombas nucleares. Cuando logra su propósito,
Spectra amenaza con destruir una ciudad de EE.UU. o Inglaterra si no le dan
cien millones de libras esterlinas. El caso es asignado al agente 007 (Sean
Connery), que en las Islas Bahamas conoce a Dominó, la atractiva amante del
misterioso Emilio Largo, que aparenta ser un ocioso millonario pero que en
realidad es el número dos de Spectra. Mientras intenta localizar el avión
secuestrado, James Bond debe enfrentarse con Fiona Volpe, la cabecilla de los
asesinos, y con los secuaces de Emilio Largo.
Sólo se vive dos veces
Esta versión de Lewis Gilbert
fue la película más taquillera en Gran Bretaña en 1967: Dos naves espaciales, una norteamericana y otra rusa,
han sido secuestradas en la órbita terrestre. Sólo la intervención del Agente
007 (Sean Connery) podrá evitar una guerra nuclear entre las dos superpotencias.
Su misión consistirá en viajar hasta Japón y desenmascarar a la peligrosa
organización Spectra y a su diabólico líder, Ernest Stavro Blofeld.
Al servicio secreto de Su Majestad
Peter
R. Hunt dirige en 1969 la sexta entrega: Tras la marcha temporal de
Connery, el actor australiano George Lazenby toma el relevo en esta nueva
aventura del agente británico 007, que en esta ocasión se asocia a un mafioso
-con cuya sensual hija Tracy Di Vicenzo se llega a casar-, para unir sus fuerzas
en la lucha conta la malvada organización Spectra. Ambientada en los alpes
suizos, el malvado Stavro Blofeld -Savalas- amenaza al mundo entero con un
malvado plan: desarrollar y lanzar una peligrosa bacteria que podría acabar con
millones de personal en todo el planeta. La ausencia del actor escocés y el
poco carisma de Lazenby hicieron de esta entrega uno de sus mayores fracasos
comerciales, pero en años posteriores no han faltado los defensores que la
reivindican como una de las más interesantes de toda la saga.
Diamantes para la eternidad
En 1971, Guy Hamilton vuelve a
la carga con esta séptima versión: En su nueva y peligrosa misión, James
Bond (Sean Connery) cambia de identidad para atrapar al responsable de la
desaparición de unos valiosos diamantes. Uno a uno, irá descartando a los
sospechosos hasta quedarse con el verdadero culpable. Pero hay tantas personas
involucradas que ni siquiera el agente 007 saldrá ileso de la misión.
Vive y deja morir
Guy Hamilton se atreve en 1973
con este "Live and let die", la primera película de Roger
Moore: En tan sólo veinticuatro horas, tres
agentes del servicio secreto británico que investigaban una red de tráfico de
drogas aparecen asesinados en extrañas circunstancias. Todas las pistas
conducen a Mister Big y a un diplomático llamado Katanga. El agente 007, James
Bond (Roger Moore), es enviado a Nueva York para investigar al enigmático
personaje.
El hombre de la pistola de oro
La
última de Guy Hamilton en 1974: Hasta el cuartel general de la
inteligencia británica llega un objeto sospechoso: una pistola de oro macizo.
Todos creen que es una señal de mal agüero y que indica la muerte del principal
baluarte de la organización: James Bond (Roger Moore). Así pues, el agente 007
debe salir en busca de la persona que le ha amenazado antes de que se convierta
en su víctima. Y el criminal parece ser el famoso Francisco Scaramanga.
La espía que me amó
En 1977, Lewis Gilbert vuelve
a la dirección de la saga: La misteriosa
desaparición de dos submarinos nucleares exige la colaboración de los mejores
agentes de los servicios secretos británico y soviético: James Bond (Roger
Moore) y la mayor Amasova. Detrás de todo se encuentra el magnate
Stromberg, que se propone la destrucción de la humanidad para fundar una
civilización pura bajo el mar.
MoonRaker
La última actuación de Lewis
Gilbert se produce en 1979: El agente
secreto James Bond (Roger Moore) recibe la orden de localizar la nave espacial
Moonraker, que ha desaparecido misteriosamente. Sus primeras pesquisas lo
llevan a seguir la pista del millonario Hugo Drax, el constructor de la nave.
Después de investigar en Venecia y en Río de Janeiro, Bond es capturado por
Drax, y descubre que el villano posee una base de lanzamiento de cohetes
espaciales con los que se propone esparcir un gas tóxico que acabe con la vida
terrestre, pero ésta no es más que la primera fase de un perverso plan que
Bond, ayudado por la Doctora Goodhead, intentará frustrar.
Sólo para sus ojos
John Glen se estrena en 1981:
En esta entrega, El agente 007 (Roger
Moore, en su mejor papel) debe acudir a recuperar el ATAC, un dispositivo
militar secreto de guía por satélite, antes de que sea vendido a los
rusos.
Octopussy
En
1983, John Glen vuelve con una de las versiones más famosas: El agente
009, compañero de James Bond (Roger Moore), es asesinado en Berlín Oriental,
aunque consigue llegar a la residencia del embajador británico antes de morir,
llevando consigo una valiosísima pieza de orfebrería: un huevo de Pascua,
creado por Fabergé. En Londres, especialistas del Servicio Secreto constatan
que se trata de una falsificación de la joya original, que será subastada en
breve. El hecho de que en un corto período de tiempo se hayan vendido piezas
parecidas despierta las sospechas de los responsables de Inteligencia, que
temen una maniobra rusa que estaría encaminada a recaudar fondos que irían
destinados a oscuras operaciones. Tras la pista de Kamal Khan, turbio
traficante de objetos de arte, James Bond llega a la India, lugar en el que
descubrirá la relación entre el sospechoso, una misteriosa mujer conocida como
Octopussy y el General Orlov, implicados todos ellos en una conspiración que
pretende desatar un conflicto nuclear.
Panorama para matar
Roger Moore interpreta por
última vez a Bond en 1985 en esta versión dirigida por John Glen: Bond (Roger Moore) recibe la misión de desenmascarar a
Max Zorin, un misterioso empresario, y aparente espía de la KGB, que amenaza
con dominar el mundo por medio de sus revolucionarios microchips. Aliado a
poderosas empresas de tecnología punta, su objetivo es destruir la falla de San
Andrés, provocando un terremoto de irreversibles consecuencias.
Alta tensión
John
Glen sigue siendo el director de la saga en 1987: El agente 007 (Timothy
Dalton) se enfrenta a una nueva misión en Bratislava: ha sido designado
expresamente por el general Koskov para que lo proteja al desertar de la KGB.
Tras escapar hacia Austria, Koskov se reúne con la organización de Bond en
Londres para ponerlos al corriente de los planes de general Puskin, que tiene
la intención de asesinar a una serie de agentes británicos. Bond no cree la
historia de Koskov, más aún cuando éste es capturado de nuevo por la KGB. Para
dar con el paradero de Koskov, Bond regresa a Bratislav, donde encuentra a la
novia del general, que también corre peligro. La ayuda a escapar, y descubre
que Koskov se halla en Tanger junto al general Whitaker, traficante de
armas.
Licencia para matar
Una
de las más famosas y la última de John Glen, en 1989: El agente 007
(Timothy Dalton) a la caza y captura de un peligroso narcotraficante
latinoamericano, con implicaciones personales de por medio: el capo de la droga
mató a un amigo suyo, y Bond desea vengarse.
GoldenEye
Martin
Campbell se estrena en 1995: En sus vacaciones, el agente Bond (Pierce
Brosnan) se encuentra con la bella y letal Xenia Onatopp, que intenta hacerse
con los planos de un nuevo helicóptero invulnerable a las interferencias.
Mientras tanto la programadora del ejército ruso Natalya Siminova es la única
superviviente de su equipo a un macabro plan del general Ourumov para hacerse
con Goldeneye, un arma espacial ultrasecreta que emite pulsos nucleares que
inutilizan cualquier equipo electrónico. Bond formará equipo con Natalya para
descubrir a los malhechores tras el robo.
El mañana nunca muere
En
esta ocasión, la dirección va de la mano de Roger Spottiswoode, en
1997: Elliot Carver, un gran magnate de los medios de comunicación, sólo
necesita conseguir los derechos de publicación en China para completar su
emporio global. Su maquiavélico plan consiste en provocar una guerra entre Gran
Bretaña y China, mediante el hundimiento de un buque de guerra inglés. James
Bond (Pierce Brosnan) emprenderá una misión contrarreloj para descubrir quién
está detrás del peligroso incidente.
El mundo nunca es suficiente
En
1999, Michael Apted nos trae la 19ª entrega: Tras la muerte del magnate
británico del petróleo Sir Robert King en un atentado en el cuartel general del
MI6, su hija Elektra hereda su billonaria fortuna en yacimientos petrolíferos
en el mar Caspio. El agente 007 (Pierce Brosnan), que se siente culpable de la
muerte de King, se convierte en el guardaespaldas de Elektra. Su fabulosa
fortuna atrae no sólo la atención de la prensa internacional, sino también la
del asesino, Renard, un hombre con una bala alojada en el cerebro que le impide
sentir dolor físico y cuya única obsesión es la venganza.
Muere otro día
Lee
Tamahori en 2002 dirige otra de las más conocidas versiones: Pierce
Brosnan interpreta a James Bond en su mayor aventura, llena de acción y
espectaculares efectos especiales. Co-protagonizada por la oscarizada Halle
Berry en el papel de la sexy superagente Jinx, "Muere otro día" no
deja un momento de respiro:Persecuciones de alto voltaje, increíbles escenarios
naturales y unos villanos que pondrán a prueba la resistencia del más famoso
agente al servicio de Su Majestad.
Casino Royale
Martin Cambell vuelve en 2006
con la primera protagonizada por Daniel Craig: La primera misión del agente británico James Bond (Daniel Craig) como
agente 007 lo lleva hasta Le Chiffre , banquero de los terroristas de todo el
mundo. Para detenerlo y desmantelar la red terrorista, Bond debe derrotarlo en
una arriesgada partida de póquer en el Casino Royale. Al principio a Bond le
disgusta Vesper Lynd , la hermosa oficial del Tesoro que debe vigilar el dinero
del gobierno. Pero, a medida que Bond y Vesper se ven obligados a defenderse
juntos de los mortales ataques de Le Chiffre y sus secuaces, nace entre ellos
una atracción mutua.
Quantum
Dirigida
por Marc Foster, en 2008, Bond se inmiscuye en sus penúltima aventura: Como
vimos al final de su anterior aventura, James Bond (Daniel Craig) ha conseguido
capturar al señor White. Ahora le utilizará para informarse sobre un misterioso
grupo terrorista. M asignará una nueva compañera a Bond: la agente del MI6
destinada en Bolivia que responde al nombre de Fields . Además, el agente 007
contará con la ayuda del agente de la CIA Felix Leiter y de Rene Mathis. Pero
quien de verdad supondrá una gran ayuda será la agente doble Camille.
Operación Skyfall
Sam Mendes dirige en 2012 la
última entrega: la lealtad de Bond a M se
pone a prueba cuando el pasado vuelve para acosarla. Como el MI6 (el servicio
secreto británico) ha sido atacado, 007 debe localizar y destruir esa amenaza,
sin importarle el costo personal que pueda suponer.
